Usar peluca padeciendo alopecia areata
El pasado mes de septiembre fue elegido como el mes de concienciación sobre la alopecia, un problema capilar que puede afectar a hombres y mujeres de cualquier edad.
Existen diferentes tipos de alopecia:
- Alopecia androgenética o andorgénica: por factores genéticos.
- Alopecia difusa: pérdida progresiva y generalizada del cabello sin llegar a ocasionar calvicie total.
- Alopecia areata: pérdida del cabello en forma de parches redondos.
- Alopecia cicatricial: por malformación, daño o destrucción de los folículos pilosos.
- Otras alopecias: traumática y por diversos tipos de foliculitis.
En concreto, la alopecia areata es una enfermedad autoinmune. El mismo organismo produce anticuerpos contra una parte del folículo capilar, provocando la caída del cabello en una o varias zonas localizadas del cuerpo, generalmente en áreas redondeadas y de tamaño pequeño del cuero cabelludo o de la barba.
Existen varios tipos de alopecia areata según el tipo de caída del cabello:
- Alopecia areata en placa única: se produce en una sola zona.
- Alopecia areata en placa múltiple: se produce en varias zonas que pueden llegar a unirse.
- Alopecia areata total: también conocida como alopecia totalis, que se produce en la totalidad del cuero cabelludo, produciendo calvicie completa.
- Alopecia areata universal: también conocida como alopecia universal o alopecia universalis, donde la caída del pelo se produce en la totalidad del cuerpo.
- Alopecia areata difusa o incógnita: cuando la pérdida de pelo es difusa y no está localizada en placas, por lo que resulta difícil diferenciarla de la alopecia androgénica femenina.
- Alopecia areata para cabello oscuro: en la que la enfermedad respeta los cabellos no pigmentados (canas), perdiéndose el cabello de color normal.
Es conocido por todos que uno de los efectos secundarios de los tratamientos oncológicos es la pérdida total del cabello, algo similar a lo que ocurre a los que padecen alopecia areata universal, una enfermedad poco conocida y por lo que habitualmente la gente cree que son pacientes oncológicos cuando no es así.
Hoy en día, ver por la calle a un hombre calvo o rapado, sin nada de pelo en su cuero cabelludo está más que asumido; no tanto cuando también carecen de cejas y pestañas, pero pasan desapercibidos.
Por desgracia, no ocurre lo mismo en el caso de una mujer, no está normalizado, llama la atención y, como se ha dicho antes, rápido se le achaca el padecimiento de una enfermedad oncológica para la que está recibiendo tratamiento.
Por ello es habitual que las mujeres usen pelucas indetectables o turbantes para disimular su carencia de cabello total o parcial, así como usar otras prótesis capilares para cejas y pestañas, u otros sistemas como es la micropigmentación y el microblading; el primero se realiza con una aguja de una punta para diseñar los pelos y agujas de tres o cinco puntas para crear la redensificación y el segundo con una pluma de metal similar a un pequeño bisturí.
Durante el pasado mes de septiembre, como parte de las acciones realizadas para la concienciación sobre la alopecia, se ha detectado cierta presencia en los medios de mujeres completamente calvas, lo que está muy bien para dar visibilidad a esa situación generada por el padecimiento de una enfermedad o por los efectos secundarios del tratamiento de otra.
Pero en diversos puntos del mundo, personas que estos años atrás han venido dando visibilidad en los distintos medios habituales de comunicación (radio, prensa escrita y TV), así como en internet (YouTube, blog y foros) a enfermedades como la alopecia areata universal y a su consecuencia visible en forma de pérdida total del cabello en todo el cuerpo, no se han sentido parte de ese mes para la concienciación sobre la alopecia por usar pelucas de forma habitual o esporádica, según sus propias preferencias y no para ocultar su carencia total de cabello, cuando ya se han mostrado públicamente con o sin peluca.
No les falta razón a la hora de afirmar que tan respetable y asumible por la sociedad es poder mostrarse totalmente calvas, como poder hacerlo usando pelucas o turbantes si así es su deseo personal.
Es más, denota la superación del estereotipo de la imagen de una mujer con cabello aceptada por la sociedad, y además naturalizan el uso de pelucas para las que así lo desean por gusto propio, o para aquellas que aún no se sienten preparadas para mostrarse completamente calvas y prefieren disimular su pérdida de cabello usando pelucas.
Y es que todas coinciden en lo traumático que resulta ir viendo cómo van perdiendo su cabello con mayor o menor velocidad. Ya sea de forma parcial como total, es un drástico cambio estético difícil de asumir y aceptar, máxime si llama la atención de los que nos rodean.
Cuando la alopecia areata es del tipo en placa única o múltiple, puede no ser difícil disimular con la recolocación del propio cabello o con el uso de extensiones o prótesis capilares; pero en el resto de los casos en los que la ausencia de cabello se hace más perceptible, se puede tomar la decisión de raparse la cabeza, algo que, si bien es una decisión dura y difícil de tomar, cuando se hace provoca cierta liberación, dando paso a un nuevo proceso de adaptación sin estar ya tan pendiente de la frustrante percepción de la paulatina pérdida de mechones de pelo.